jueves, 21 de agosto de 2008

Nada que perder.


Foto:*rami777
Guíame hasta ese momento.
Llévame hasta tus pensamientos.
Prometo cerrar los ojos, no memorizaré el camino.
Me conformo con pasar un instante entre tus pensamientos más distantes.
Enséñame tus gustos, tus creencias ocultas.

Después podrás pasarte por mi cabeza y juzgar mis rarezas.
Mis sueños no son más que meros pasatiempos, lugares donde esconder el aburrimiento.
No estoy segura de que pueda aportarte algo pero no está de más comprobarlo.

Compartamos nuestros oasis, quizá al hacerlo lleguemos a tocarlos, sentirlos o creer que podemos conseguirlos.

Conozcámonos partiendo de cero.
Contemos hasta 10 y si por entonces no hemos conseguido lo necesario para seguir hasta 20 podemos retroceder, hacer como si ningún turista hubiese pasado por nuestra cabeza. Si por el contrario conseguimos engancharnos algo habremos ganado.
No hay garantías de ganancias constantes... es ahí donde reside lo interesante.



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha encantado tu texto... tienes mucho futuro escribiendo!! Un saludo

Gandaina dijo...

No hace falta ganar para jugar... El juego en sí es la victoria frente a la pasividad. Empezar a contar hasta 10 es sólo el comienzo.